-"Cariño, el desayuno está en la cocina, he salido temprano para hacer unas compras. Te quiero."
Así que va a la cocina, y como no, ahí estaba el desayuno y el periódico del día esperándole. Su hijo también está desayunando. Luis le pregunta:
-Hijo ¿que pasó ayer por la noche?.
Su hijo le contesta:
-Bien, pues volviste después de las 3 de la madrugada, borracho, meado y con delirios.
- ¿Y... ya?
- No. También rompiste algunos muebles, vomitaste en el pasillo y te pusiste un ojo morado cuando te diste contra la puerta.
- ¿Y algo más?
- Nos despertaste a todos con tus canciones...
Confundido, Luis pregunta:
-¿Y como es que todo esta tan limpio y ordenado, y el desayuno esperándome en la mesa?
Su hijo responde:
-Ahhh... eso. Verás, mamá te arrastró hacia el dormitorio para acostarte y cuando intentó quitarte los pantalones, tu gritaste:
-¡Quieta perra, estoy casado!
Conclusiones:
* Una resaca autoinducida: 100 €
* Mobiliario roto: 2.000 €
* Desayuno: 20 EUR
* Decir la frase adecuada... NO TIENE PRECIO!!!
(a ver si por la publicidad se regalan algo, caray!)
Desde luego que na "frase adecuada" no tiene precio.
ResponderEliminarNo conocía esta historia y me ha gustado mucho.
Se la voy a contar a mi mujer....
HE HE HE
Un abrazo,
Esteban
Con toda la raón, no tiene precio.
ResponderEliminarLo de las collejas debe de estar muy extendido sobre todo en el sector femenino, sino que se lo digan a mi parienta tambien.
Saludos y unidos en la depresión!!!
Espero con inpaciencia lo del ombligo, porque nos va a dar para dos o tres artículos por lo menos.
ResponderEliminarcreo que el amor limpia y olvida todos los desastres para todo lo demas esta master card jejejeje me ha gustado tu articulo besos despeinada
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