Entre los muchos blogs que me resultan interesantes, demasiados para seguirlos todos de una manera habitual, tienes que escoger aquellos que van a ser los de cabecera, los que vas a leer siempre que publiquen algo. Uno de ellos es "La novia de papá" de la escritora Paloma Bravo, que se autodefine así: Soy madrastra, periodista y autora de “La novia de papá” (Plaza&Janés). Este blog no lo escribo yo, lo escribe Sol Beramendi, la protagonista de mi novela. O sea, que es ficción y, por lo tanto, absolutamente real.
Yo, os recomendaría leerla, pero eso es vuestra decisión, por supuesto. Entretanto, he decidido compartir con vosotros uno de los últimos post publicados. Y los comentarios, que son tan ilustrativos en este caso. El post se llama "El otro lado" y dice así:
"Sol, te escribo desde el otro lado", dice Miguel. "Desde el lado oscuro de la fuerza, desde el lado frágil, desde el lado roto, desde el lado fuerte".
Y me cuenta su historia:
La hija pequeña de Miguel y Teresa, la tercera, tenía un año cuando él empezó a darse cuenta. O, mejor dicho, cuando se dio cuenta de que ya no podía ignorarlo: Teresa era infiel.
Tenía fácil la logística. En un hotel cerca de su oficina, en casa cuando él viajaba, fuera cuando viajaba ella...
Es verdad que llevaban muchos años casados, que ya acumulaban vicios, silencios, rutinas y cargas (la compra, las actividades extraescolares, los deberes...). Perezas.
Todo eso Miguel lo entendía, pero... Pero no conseguía encararla y preguntar. No quería una mentira. Y ella sabe mentir: "es dura, Sol, una ejecutiva con sueldazo. Y no quiero caer en el otro tópico, en el de las mujeres que mandan como hombres. Pero es lo que es: una mujer brillante, bien pagada, con su coche de empresa... Una mujer con más éxito que yo, que la persona con la que se casó".
Y Miguel intentó compensar ese desequilibrio y poner más en el otrolado: en el cole, en la compra, en los médicos... En el otro lado del éxito.
"Quizá me consideraba un fracasado, quizá no soy lo que ella quería, pero habíamos vivido juntos todos esos años, habíamos tenido tres hijos, y nunca se quejó, nunca dijo nada. Podría haberlo hecho. En su trabajo no duda..."
Al final Miguel preguntó y ella mintió. Sabían los dos que estaba mintiendo. Mientras, Miguel confirmaba que su infidelidad tenía nombre desde hacía ya dos años.
Y Miguel empezó a imaginar lo peor: la custodia... Un juez imprevisible y ella peleando a muerte.
Miguel no se atrevía a separarse y se callaba. Se callaba y se quedaba. Se quedaba callado.
Tampoco hablaba ella: no se quería separar, no lo quería arreglar.
Y no lo hablaban, y no lo arreglaban, y lo arrastraban, y lo engordaban.
El silencio creció tanto que ya no cabían todos en la casa y Miguel se fue. Se fue al infierno que había imaginado: peleas, jueces, custodias... Del silencio pasaron a los gritos. De los gritos otra vez al silencio, a la tristeza.
Y Miguel sonríe ahora cuando tiene a los niños con él y calla, triste, cuando no están. Pero al menos ya no le duele todo el cuerpo.
"Aún no soy feliz, Sol, pero estoy más tranquilo, la verdad. Y sé que la felicidad va a llegar. Disfruto de los niños, del deporte, de mi vida y paso mucho tiempo solo, dejando pasar los días. En algún momento dejaré de contarlos y dejarán de pasar, los agarraré y los viviré a fondo. Lo que pasa es que todavía hay muchas veces en que, con el teléfono apagado, los niños con su madre, la casa en silencio, echo de menos nuestra vida. Y sé que lo que añoro no es la vida que tuvimos, sino la vida que soñamos, la que creímos tener..."
Miguel cierra su historia con un dato: "más de 120.000 matrimonios se rompieron en 2010. Más de 240.000 personas. Más de 240.000 tragedias". Y yo discrepo: muchas tragedias, sí, también mucho alivio, mucha mejora, mucha paz, mucho futuro.
También quiero compartir algunos de los comentarios, que me han parecido ilustrativos:
- "Soy un miguel" pq durante 2 años y medio lo he sido. Pero quizas en mi caso, un poco mas cretino, guebon y conformista.Ya han pasado casi 5 meses desde que ella, un dia despues de haber estado juntos en una tienda de muebles sueca, acaramelados, siendo felices y comiendo perritos de un euro, comprandola caprichitos estupidos en esa tienda, al llegar de trabajar yo (ella estudiante mantenida por su familia) me dijera "tenemos que hablar" y 3 minutos despues ya estuviera buscandose piso.Cretino por no verlo venir y creerme a salvo de todo.Guebon, por no reaccionar como un hombre, y callarme y llorar.Conformista por no ser capaz de haberme vengado sentimentalmente.
Miguelon! Asi es como deberia llamarme.
Pero Miguel, si lees esto, ole tus cojones, la vida sigue, preocupate por ser feliz con tus hijos y olvidate del resto.Yo no tengo hijos, pero mi perra me esta salvando la vida. Un abrazo!!" (varón)
Miguelon! Asi es como deberia llamarme.
Pero Miguel, si lees esto, ole tus cojones, la vida sigue, preocupate por ser feliz con tus hijos y olvidate del resto.Yo no tengo hijos, pero mi perra me esta salvando la vida. Un abrazo!!" (varón)
- "Yo también sentí como Miguel el inconsolable dolor de perder lo que podía haber sido y no fue." (varón)
- "Historia de un calzonazos que no valor para pagarle a ella con la misma moneda, ni tuvo valor para sacarle todo el dinero que pudo mientras él estaba casado (era el quien administraba la casa), ni para poner a los críos en su contra (también era el quien se encargaba de ellos), ni para desaparecer y ahorrarse pensiones y gastos de juicio, además, todavía la echa de menos. Patético. No me da ninguna pena, se merece estar como esta." (mujer)
- "Sol, tengo un nudo en la garganta. Creo que soy la ex de Miguel. Y si no lo soy, me parezco mucho. Tengo el mejor esposo de este mundo, pero otro ser me llena la vida de toda la pasión y magia que el tiempo me arranco a pedazos. No tenemos hijos como excusa para no separarnos, para callarnos. Pero aun así, sigo mintiendo y el sigue callando. No quiero herirlo más separándome …o quizás no sé si será el mayor error de mi vida cambiar algo hermoso y seguro por algo incierto, aunque lleno de pasión y mil motivos. El vive con la esperanza de que todo volverá a ser como antes y yo vivo anhelando tener una respuesta del universo, una señal que me indique el camino menos atormentado para todos" (mujer)
Hay más comentarios en el blog, por si os interesan...
cuantos migueles......
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues allá me voy a leer el resto de los comentarios :) Desde luego, el post me parece tristemente muy real, pero me gusta el final, un final que habla de un nuevo comienzo.
ResponderEliminarUn besazo.
S.